lunes, 23 de julio de 2012


Ley de Responsabilidad Social en Radio y Televisión (RESORTE)

Es el nombre de la Ley aprobada por la Asamblea Nacional de Venezuela vigente desde el 7 de febrero de 2011, cuyo objeto es el de establecer la responsabilidad social de los prestadores de los servicios de radio y televisión, sus relacionados, los productores nacionales independientes y los usuarios en el proceso de difusión y recepción de mensajes, fomentando el equilibrio democrático entre sus deberes, derechos e intereses, a los fines de procurar la justicia social y de contribuir a la formación de la ciudadanía, la democracia, la paz, los derechos humanos, la educación, la cultura, la salud pública, y el desarrollo social y económico de la Nación, de conformidad con las normas y principios constitucionales, de la legislación para la protección integral de los niños, niñas y adolescentes, la educación, la seguridad social, la libre competencia y la Ley Orgánica de Telecomunicaciones.

Esta ley aplica a todo texto, imagen o sonido cuya difusión y recepción tengan lugar dentro del territorio de la República Bolivariana de Venezuela, y sea realizada a través de:

  • Servicios de radio: radiodifusión sonora en amplitud modulada (AM); radiodifusión sonora en frecuencia modulada (FM); radiodifusión sonora por onda corta; radiodifusión sonora comunitaria de servicio público, sin fines de lucro; y servicios de producción nacional audio, difundidos a través de un servicio de difusión por suscripción.
  • Servicios de televisión: televisión UHF; televisión VHF; televisión comunitaria de servicio público, sin fines de lucro; y servicios de producción nacional audiovisual, difundidos a través de un servicio de difusión por suscripción.
  • Servicios de difusión por suscripción.
  • Medios electrónicos.

Tipos de Programas

En la ley se definen los siguientes programas:

  • Programa cultural y educativo: aquél dirigido a la formación integral de los usuarios y usuarias en los más altos valores del humanismo, la diversidad cultural, así como en los principios de la participación protagónica del ciudadano en la sociedad y el Estado.
  • Programa informativo: cuando se difunde información sobre personas o acontecimientos locales, nacionales e internacionales de manera imparcial, veraz y oportuna.
  • Programa de opinión: dirigido a dar a conocer pensamientos, ideas, opiniones, criterios o juicios de valor sobre personas, instituciones públicas o privadas, temas o acontecimientos locales, nacionales e internacionales.
  • Programa recreativo o deportivo: dirigido a la recreación, entretenimiento y el esparcimiento de los usuarios y usuarias, y no clasifique como programa de tipo cultural y educativo, informativo o de opinión.
  • Programa mixto: el que combine cualquiera de los tipos de programas anteriormente enumerados.

Bloques de Horarios

Según la ley, se diferencian tres bloques horarios:

  • TU: Todo Usuario - es aquél durante el cual sólo se podrá difundir mensajes que puedan ser recibidos por todos los usuarios y usuarias, incluidos niños, niñas y adolescentes sin supervisión de sus madres, padres, representantes o responsables. (7AM a 7PM)
  • SU: Supervisado - es aquél durante el cual se podrá difundir mensajes que, de ser recibidos por niños, niñas y adolescentes, requieran de la supervisión de sus madres, padres, representantes o responsables. (7PM a 11PM) (5AM a 7AM)
  • A: Adulto - es aquél durante el cual se podrá difundir mensajes que están dirigidos exclusivamente para personas adultas, mayores de dieciocho años de edad, los cuales no deberían ser recibidos por niños, niñas y adolescentes. (11PM a 5AM)

Restricciones por Horario

Dependiendo del horario, se restringen los elementos que pueden ser transmitidos:
En el horario Todo Usuario, solo se pueden transmitir elementos de lenguaje, salud y sexo tipo "A", violencia tipo "A y B".
En el horario Supervisado está permitida la transmisión de elementos de lenguaje y salud tipo "A y B", sexo "A, B y C" y violencia tipo "A, B, C y D".
En horario Adulto, sólo hay límite de transmisión con los elementos sexuales, está permitida la transmisión de elementos de lenguaje tipo "A, B y C", salud y sexual tipo "A, B, C y D" y violencia tipo "A, B, C, D, y E".
En ningún horario está permitida la difusión de elementos sexuales tipo "E".

Modalidades de Acceso del Estado a Espacios Gratuitos y Obligatorios

El Estado podrá difundir sus mensajes a través de los servicios de radio y televisión. A tales fines, podrá ordenarle a los prestadores de estos servicios la transmisión gratuita de:
  • Los mensajes previstos en la Ley Orgánica de Telecomunicaciones. La orden de transmisión gratuita y obligatoria de mensajes o alocuciones oficiales podrá ser notificada válidamente, entre otras formas, mediante la sola difusión del mensaje o alocución a través de los servicios de radio o televisión administrados por el Ejecutivo Nacional.
  • Mensajes culturales, educativos, informativos o preventivos de servicio público, los cuales no excederán, en su totalidad, de setenta minutos semanales, ni de quince minutos diarios. A los fines de garantizar el acceso a los servicios de radio y televisión, el órgano rector del Ejecutivo Nacional, con competencia en comunicación e información, cederá a los usuarios y usuarias diez minutos semanales de estos espacios, de conformidad con la ley.

Democratización en los Servicios de Radio y Televisión

Los prestadores de servicios de radio y televisión deberán difundir, durante el horario todo usuario, un mínimo de tres horas diarias de programas culturales y educativos, informativos o de opinión y recreativos dirigidos especialmente a niños, niñas y adolescentes, presentados acordes con su desarrollo integral, con enfoque pedagógico y de la más alta calidad. En la difusión de estos programas se deberá privilegiar la incorporación de adolescentes como personal artístico o en su creación o producción. Los prestadores de servicios de radio y televisión deberán difundir diariamente, durante el horario todo usuario, un mínimo de siete horas de programas de producción nacional, de las cuales un mínimo de cuatro horas será de producción nacional independiente. Igualmente, deberán difundir diariamente, durante el horario supervisado, un mínimo de tres horas de programas de producción nacional, de los cuales un mínimo de una hora y media será de producción nacional independiente. Quedan exceptuados de la obligación establecida en el presente párrafo los prestadores de servicios de radiodifusión sonora y televisión comunitaria de servicio público, sin fines de lucro.


Son elementos de lenguaje:
Tipo "A" Textos, imágenes o sonidos de uso común, que pueden ser presenciados por niños, niñas y adolescentes sin que se requiera la orientación de madres, padres, representantes o responsables, y que no clasifiquen en los tipos “B” y “C”.
Tipo “B” Textos, imágenes o sonidos que, en su uso común, tengan un carácter soez.
Tipo “C” Textos, imágenes o sonidos que, en su uso común, tengan carácter obsceno, que constituyan imprecaciones, que describan, representen o aludan, sin finalidad educativa explícita, a órganos o prácticas sexuales o a manifestaciones escatológicas.
Son elementos de salud:
Tipo “A” Textos, imágenes o sonidos utilizados para la divulgación de información, opinión o conocimientos sobre la prevención, tratamiento o erradicación del consumo de alcohol, tabaco, sustancias estupefacientes o psicotrópicas, así como de la práctica compulsiva de juegos de envite y azar y de otras conductas adictivas que puedan ser presenciados por niños, niñas y adolescente sin que se requiera la orientación de madres, padres, representantes o responsables.
Tipo “B” Textos, imágenes o sonidos utilizados para la divulgación de información, opinión o conocimientos sobre la prevención, tratamiento o erradicación del consumo de alcohol, tabaco, sustancias estupefacientes o psicotrópicas, así como de la práctica compulsiva de juegos de envite y azar y de otras conductas adictivas, que de ser presenciados por niños, niñas y adolescentes requieran la orientación de sus madres, padres, representantes o responsables.
Tipo “C” Textos, imágenes o sonidos en los programas y promociones que se refieran directa o indirectamente: al consumo moderado de alcohol o tabaco, sin que se expresen explícitamente sus efectos nocivos o tengan como finalidad erradicar las conductas adictivas que producen; al consumo excesivo de bebidas alcohólicas o de tabaco, en los cuales se expresan explícitamente sus efectos nocivos; a la práctica compulsiva a los juegos de envite y azar, en los cuales se expresan explícitamente sus efectos nocivos; o, al consumo de sustancias estupefacientes o psicotrópicas, en los cuales se expresa explícitamente sus efectos nocivos.
Tipo “D”. Textos, imágenes o sonidos en los programas y promociones que directa o indirectamente se refieran al consumo excesivo de bebidas alcohólicas o tabaco, en los cuales no se exprese explícitamente sus efectos nocivos para la salud; se refieran a la práctica compulsiva de juegos de envite y azar, en los cuales no se exprese explícitamente sus efectos nocivos para la salud; asocien el consumo de bebidas alcohólicas o tabaco con ventajas en la posición económica, en la condición social o en el ejercicio de la sexualidad; asocien la práctica compulsiva de juegos de envite y azar, con ventajas en la posición económica, en la condición social o en el ejercicio de la sexualidad; asocien el consumo de bebidas alcohólicas o tabaco con una mejora en el rendimiento físico o psicológico; presenten en forma negativa la sobriedad o la abstinencia de bebidas alcohólicas y tabaco; se refieran al consumo de sustancias estupefacientes o psicotrópicas, en las cuales no se expresen explícitamente sus efectos nocivos para la salud; asocie el consumo de sustancias estupefacientes o psicotrópicas con ventajas en la posición económica, en la condición social o en el ejercicio de la sexualidad; asocien el consumo de sustancias estupefacientes o psicotrópicas con una mejora en el rendimiento físico o psicológico; o presenten en forma negativa la abstinencia de sustancias estupefacientes o psicotrópicas.
Son elementos de sexo:
Tipo “A” Textos, imágenes o sonidos utilizados para la difusión de información, opinión y conocimiento sobre salud sexual y reproductiva, maternidad, paternidad, promoción de la lactancia materna y de expresiones artísticas con fines educativos, que pueden ser recibidos por niños, niñas y adolescentes sin que se requiera la orientación de madres, padres, representantes o responsables.
Tipo “B” Textos, imágenes o sonidos utilizados para la difusión de información, opinión y conocimientos sobre sexualidad y reproducción humana y de expresiones artísticas con fines educativos, que de ser recibidas por niños, niñas y adolescentes, requieran la orientación de sus madres, padres, representantes o responsables.
Tipo “C” Textos, imágenes o sonidos sexuales implícitos sin finalidad educativa; o manifestaciones o aproximaciones de carácter erótico que no incluyan actos o prácticas sexuales explícitas.
Tipo “D” Textos, imágenes o sonidos, sobre desnudez sin finalidad educativa, en las cuales no se aludan o muestren los órganos genitales; actos o prácticas sexuales dramatizados, en los cuales no se muestren los órganos genitales; mensajes sexuales explícitos; o dramatización de actos o conductas sexuales que constituyan hechos punibles, de conformidad con la Ley.
Tipo “E” Textos, imágenes o sonidos sobre actos o prácticas sexuales reales; desnudez sin finalidad educativa en las cuales se muestren los órganos genitales; actos o prácticas sexuales dramatizados en los cuales se aludan o muestren los órganos genitales; actos o prácticas sexuales reales o dramatizados en los cuales se amenace o viole el derecho a la vida, la salud y la integridad personal o se menoscabe la dignidad humana; o actos o conductas sexuales reales que constituyan hechos punibles de conformidad con la Ley.
Son elementos de violencia:
Tipo “A” Textos, imágenes o sonidos utilizados para la prevención o erradicación de la violencia, que pueden ser presenciados por niños, niñas y adolescentes sin que se requiera la orientación de madres, padres, representantes o responsables, siempre que no se presente el hecho violento o sus consecuencias en forma detallada o explícita.
Tipo “B” Textos, imágenes o sonidos que presenten violencia dramatizada o sus consecuencias de forma no explícita.
Tipo “C” Textos, imágenes o descripciones gráficas utilizadas para la prevención o erradicación de la violencia, que de ser recibidas por niños, niñas o adolescentes, requieren la orientación de sus madres, padres, representantes o responsables, siempre que no presenten imágenes o descripciones gráficas detalladas o explícitas del hecho violento o sus consecuencias.
Tipo “D” Textos, imágenes o descripciones gráficas que presenten violencia real o sus
consecuencias, de forma no explícita; o violencia dramatizada o sus consecuencias de forma explícita y no detallada.
Tipo “E” Textos, imágenes o descripciones gráficas que presenten violencia real o dramatizada, o sus consecuencias de forma explícita y detallada; violencia física, psicológica o verbal entre las personas que integran una familia contra niños, niñas y adolescentes o contra la mujer; violencia sexual, la violencia como tema central o un recurso de impacto reiterado; o que presenten, promuevan, hagan apología o inciten al suicidio o a lesionar su propia integridad personal o salud personal.

jueves, 28 de junio de 2012


Material informático y contaminación medioambiental
La nuestra es una sociedad que lo hace todo con ordenadores y cada vez les pedimos más tareas. El resultado es la generación de miles de toneladas de basura electrónica. En este reportaje ahondamos algo en un tema más que complejo.

Incluso tareas tan sencillas como escribir sobre un papel en blanco se convierten hoy en día en querer convertirlo casi en un miniposter. Todo esto hace que el software cada día se sofistique más, con novedades que en algunos casos permiten a las empresas lanzar actualizaciones como mínimo una vez al año, si no dos. En cualquier caso, las máquinas que deben procesar este software cada vez con más prestaciones van quedándose obsoletas porque, en realidad, la industria del software añade nuevos gadgets a sus programas, que precisan de más máquina. Para determinados usos, el cambio de ordenadores es anual. El resultado con los continuos avances tecnológicos es que el rendimiento del hardware no supere los tres años para poder continuar siendo útil. Esta velocidad progresiva de obsoletización del material informático ha creado un enorme problema ambiental, porque en la fabricación de ordenadores (y, en general, en la electrónica de consumo) se emplean materiales tóxicos para nuestro entorno.

Fabricar un gramo de microchip requiere 800 gramos de combustibles fósiles, 36 gramos de productos químicos y 16.000 gramos de agua; en total 16.836 gramos de materiales. En cuanto a la generación de materiales secundarios, nos encontramos con un escenario parecido: para elaborar un gramo de chip de 32MB se generan 630 de materiales secundarios. Esta relación de 1 a 630 es muy alta si la comparamos, por ejemplo, con los coches, donde es de 1 a 2. La "ecoeficiencia " es, pues, muy baja. Los circuitos microelectrónicos, como son artefactos altamente organizados (de entropía muy baja), requieren una gran cantidad de energía y de materia para fabricarse. El estudio se efectuó cuando la electrónica se movía en una escala por encima de los 90 nanómetros (nm). Este año, los procesadores ya están por bajo de este índice e INTEL ya ha logrado fabricar chips con más de 500 millones de transistores y tecnología de 65 nm. Recientemente ya se ha anunciado el procesador con tecnología de 45 nm y 1.000 millones de transistores. Parece que este tipo de chip estará generalizado a finales del año 2007 o principios de 2008 y, siguiendo la ley de Moore sobre el proceso de miniaturización y de aumento de la potencia de cálculo, pasados dieciocho meses -a mediados del año 2009 o el 2010- los microchips se moverán por debajo de los 25 nm. Vamos, pues, hacia un escenario con unos utensilios nanoelectrónicos de consumo generalizado y vida útil muy corta que nos aportarán una nanochatarra o unos nanoresiduos cuya problemática y efectos ambientales aún no conocemos.
La cuestión del software del sistema operativo

Otro de los escollos para dar más tiempo de vida a un ordenador es el software del sistema operativo. Los dos grandes, Windows de Microsoft y McOS de Apple se van actualizando con nuevas prestaciones, pero también precisan de procesadores más rápidos. Ahí, el sistema operativo de código abierto Linux (a parte de sus otras muchísimas ventajas) ha sabido crear un software que puede operar con máquinas que tengan procesadores poco rápidos y poca memoria, tanto de disco duro como de RAM. Esto permite que muchos ordenadores puedan alargar su vida simplemente cambiándose a Linux. Actualmente, paquetes de ofimáticas en código abierto como LibreOffice (para sistema operativo Linux) o NeoOffice (para ordenadores Apple) han sido creados para estos sistemas y tienen prestaciones parecidas a las del Office de Microsoft. Lo mismo podemos decir de navegadores como el Firefox o el antiguo Mozilla, que tienen versiones para una gran variedad de sistemas operativos. 




Se recomienda la lectura del interesante informe de Alejandro Castán, Material informático y contaminación medioambiental.